Ya que nos estamos preparando para nuestra última parada en China – estoy asombrada con nuestro viaje.  Ha sido increíble y librante no tener que sentar me en un escritorio todo el tiempo y trabajar bajo mi propio tiempo y términos.  Hemos visto tantas cosas asombrosas e increíbles que nunca en un millón de años pensaría que las iba a ver.  Por ejemplo, hace cuatro años, Abi y Jonathan nos visitaron en Honolulu para la navidad y nos ensenaron un video de una caminata llena de locura en China, y recuerdo haber dicho, “¡eso se ve divertido!”  Nunca me pasó por la mente que cuatro años después yo estaría en esa misma caminata.

China es el país donde vamos a pasar la mayoría del tiempo.  A pesar de ser un país muy grande, es donde se encuentra la familia de Richard.  Espero que cuando lleguemos a México, podamos pasar ms tiempo allí.  Tengo planes con Imelda y Austin y Cara.  No recuerdo si ya le dije al marido…Richard puede conocer algunos de mis 90 tantos primos hermanos y algunos de mis 16 tíos y tías.  Los mexicanos, a diferencia que los chinos, no tienen nombres diferentes para las tías y tíos basados en el orden de nacimiento.  Simplemente es tío y tía y primo y prima.  Los hijos de mis primos hermanos se consideran mis sobrinos.  Tengo una abuela que vive.  Entre Julio y agosto falleció mi abuela paterna y mi abuelo materno.  Me gustaría que Richard conozca a mi abuela materna.  Me hubiera gustado que conociera a mi abuela, Ramiro.  Se hubieran llevado bien.  Los extraño.  Me desvió.

China es un lugar increíble.  Es un país que está cambiando rápidamente y que esta intento encontrar su camino.  Otras observaciones que he hecho:

• Cuando escalábamos Hua Shan vi a mujeres en zapatillas, botas, faldas y chores. Actualmente, en cualquiera de los monumentos que íbanos a ver, los turistas chinos siempre estaban muy bien vestidos.  Me sentía un poco cochambrosa – con mi ropa un poco más grande de lo necesario.  No creo que los pantalones de yoga han llegado aquí todavía.
• Vimos un señor en un traje de negocios escalando Hua Shan.
• Cuando estaba con Marine en Hua Shan, me pedían que me tomara más fotos y selfies que cuando estoy con Richard…no estoy segura si la razón es porque Richard está conmigo o porque Marine está muy bonita y todos quieren una foto con ella.
• Los trenes de alta-velocidad se han convertido en mi nueva forma de transportación favorita.
• Tengo que aprender Mandarín. Puedes hacerte entender sin hablarlo…pero yo lo tengo que aprender.
• China tiene la mayoría de las conveniencias modernas que encuentras en los Estados Unidos.
• No vi a mucha gente sin hogar…me sorprendió. ¿Cómo es que un país con un billón de personas no tenga altos niveles de personas sin hogar?  Vi pocas, pero no el mismo niel que cuando vivía en Seattle y Honolulu o hasta en Yakima que está aumentando la cantidad de personas sin hogares.
• No hay mucha gente pidiendo dinero. Hay uno que otro.
• Todos están echándole ganas.

Cuando piense en China, voy a pensar en el movimiento de las ciudades, la gracia con la que me recibió la familia de Richard y los momentos de calma y paz que encontramos mientras explorábamos los monumentos y observábamos todo esa historia.  Estoy muy contenta que hemos tomado este viaje.  No diere que fue una decisión difícil porque los dos estábamos listos para algo diferente.  Extrañamos a nuestras familias y amigos y nos da gusto que puedan compartir este viaje atreves del blog.